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Al demonio, es San Pascualito Rey

Posted by : Like A Sound-Day on : viernes, 22 de mayo de 2015 0 comments
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Celebraron quince años, escucharlos en vivo después de poner cien mil veces el “Sufro, sufro, sufro” fue sufrir de nuevo como si las cicatrices fueran heridas que no cerraron jamás y a ellas se unieran otras heridas más recientes, más frescas para gritar desde lo profundo “hagamos de cuenta que no pasó nada, que no hubo mordidas ni miradas”.

San Pascualito Rey subió al escenario poco antes de las 9 de la noche, mientras el Vivian Blumenthal se iba llenando poco a poco hasta que las butacas ya no fueron suficientes para todos, las primeras tres rolas fueron para un público que estaba sentado como si fuera a un concierto de música de cámara, hasta que Pascual, probablemente harto de la apatía de los tapatíos, invitó a todos a ponerse de pie, y al ritmo de “Olvídate de mí” nadie volvió a sentarse.

Foto, Adrián Mercado.
Fue una noche para hacer cómplice del gozo y del dolor al de al lado coreando las letras que algunos ya tenían tatuadas en la memoria y otros tantos en la piel, una velada para recordar y vivir las glorias perdidas de un pasado extrañamente común. Cumplieron la promesa de tocar rolas de su nueva producción, que por cierto suenan con más poder de lo que regularmente estamos acostumbrados a escuchar de San Pascualito Rey, la consigna sigue siendo la misma: no repetirse.  

Probablemente uno de los mejores momentos fue cuando Pascual rompió la cuarta pared  casi al final de “Flush” bajándose del escenario y entrándole al slam, todos los presentes celebraron el gesto con gritos y baños de cerveza, al final, nadie quería que terminara, regresaron en dos ocasiones, porque son débiles, dijo Pascual, como nosotros.

La noche se fue entre cantos que pasaban a los gritos y la inminente necesidad de tener cerca una maldita botella de tequila, pero había cerveza y eso fue casi suficiente para brindar con ellos, no importaba nada más, estuvieron ahí, deshaciéndose en el escenario a cada nota, Pascual se desgarró el alma palabra tras palabra, nosotros con ellos, maldiciendo o bendiciendo a viejos y nuevos amores.


Cantante Calva
@Yahelayda

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