Foto vía Auditorio Telmex. |
El 19 días y 500 noches es probablemente el álbum más conocido de Sabina y también el que lo convirtió en leyenda, ¿quién de nosotros no ha cantado “cerrado por derribo” al punto del llanto? ¿Cuántos tienen una rubia platino o una barbie superestar a quien dedicarle unos versos de Joaquín? ¿O cuántos de ustedes más de alguna madrugada desearon estar cerca de la puerta de La Magdalena?
Ver a Joaquín desde la penúltima fila de una de las esquinas del auditorio fue definitivamente lo de menos, acompañado de un bombín y seis músicos, entró al escenario con una sonrisa que nunca había visto en su cara. Cantó “Ahora que” y la nostalgia se hizo presente con los primeros acordes de “19 días y 500 noches” y no se fue, se quedó entre las canciones y las butacas, en las voces de los muchos de nosotros que cantábamos como si de verdad esta sí fuera la última vez que lo escucháramos en vivo, porque a sus 66 años, con esa voz aguardientosa que lo caracteriza parece que Joaquín está cumpliendo la sentencia que escribió hace 15 años en “A mis cuarenta y diez”.
La primera vez que escuché a Sabina en vivo fue en el foro de la Expo cuando Andalucía fue invitado de honor de la FIL, esa vez, sentí que me quedó a deber muchísimas canciones. Anoche, pareciera que por fin saldó la deuda que tenía no sólo conmigo sino con el montón de personas que llenaron el auditorio telmex y con otros tantos que irán a sus conciertos o los muchos que comprarán el 500 noches para una crisis. Por fortuna, pese a todas las crisis, el corazón sigue sin pasar de moda.
Cantante Calva
@Yahelayda
No hay comentarios: